Un elemento vertical de granito, adosado a la niña de la derecha y prolongado hacia abajo en uno de los apoyos del banco, realza su aplomo, significando su temperamento tranquilo.
En comparación con la anterior, la niña de la izquierda está más libre, no guiada por elementos estáticos próximos, y dispone aparentemente de una holgura mayor de movimientos; se significa así su temperamento más inquieto e imprevisible (cf. los dos análisis de este cuadro).